Mientras que aquí en Alemania hace frío y está oscuro, en Sudáfrica brilla el sol. Cuando nosotros tenemos invierno, en el otro lado del globo comienza el verano. Esto convierte a Sudáfrica – especialmente de diciembre a febrero – en un destino de viaje popular. Nosotros mismos ya estuvimos en Ciudad del Cabo y alrededores y hemos reunido nuestros mejores consejos para ti.
Sudáfrica: Los 5 lugares y rutas más hermosos
Con una superficie de alrededor de 1,22 millones de kilómetros cuadrados, Sudáfrica es tres veces y media más grande que Alemania. Hay innumerables lugares que merece la pena visitar y grandes experiencias que no deberías perderte.
Cuáles son nuestros favoritos, te lo contamos aquí:
#1 Ciudad del Cabo
Enclavada entre el Océano Atlántico y montañas de impresionante belleza, que a partir de la tarde se bañan en una luz mágica, se encuentra Ciudad del Cabo. La segunda metrópoli más grande de Sudáfrica después de Johannesburgo es para muchas personas la ciudad más hermosa del mundo. Es la única ciudad de un millón de habitantes situada directamente junto a un parque nacional, rodeada por dos océanos (Atlántico e Índico) y con ballenas y delfines justo “en la puerta de casa”.
Para poder disfrutar de esta ubicación de belleza única al máximo, te recomendamos un alojamiento en los barrios de Green Point, Sea Point y Camps Bay, o sea, cerca del agua. Aquí te despiertas cada mañana con vistas al mar y puedes decidir: ¿quiero pasar el día relajándome en la playa, ir mejor al centro o visitar una de las regiones vinícolas de los alrededores? Es la diversidad de Ciudad del Cabo la que te regalará innumerables recuerdos.
Lo que debes hacer sí o sí en Ciudad del Cabo:
- disfrutar del panorama de 360° en la Montaña de la Mesa
- hacer senderismo al amanecer hasta la Cabeza de León (por favor, en un grupo grande)
- visitar Bo-Kaap
- tumbarse en la playa Clifton 4th
- probar muchas delicias en el Oranjezicht City Farm Market
- reservar una cata de vinos en Stellenbosch, Paarl o Franschhoek
#2 Garden Route
A quien le gusten los largos roadtrips, le encantará la Garden Route. Oficialmente, la ruta por la N2 empieza en Mossel Bay. No obstante, si has volado a Ciudad del Cabo, puedes empezar desde allí tu viaje por la carretera más famosa de Sudáfrica. Para ir hasta Port Elizabeth y regresar deberías planificar entre 10 y 14 días. Cuanto más tiempo tengas disponible, más relajado será tu roadtrip, que te llevará por la costa – en tramos que difícilmente podrían ser más variados. Así que, en marcha y adelante.
Las mejores paradas en la ruta de Ciudad del Cabo a Port Elizabeth:
- por la Chapman’s Peak Drive hasta el Cabo de Buena Esperanza (más información más adelante)
- Avistamiento de ballenas en la “capital mundial de las ballenas” Hermanus
- caminar hasta las cuevas Klipgat en De Kelders
- en el punto más austral de África en Cabo Agulhas mirar hasta el “fin del mundo”
- pasear entre infinitas dunas con vista al mar turquesa en la Reserva Natural De Hoop
- vivir la espectacular ruta de senderismo St. Blaize en Mossel Bay
- alquilar un kayak en Wilderness y disfrutar la naturaleza desde el agua
- maravillarse con las lagunas únicas de Knysna
- hacer una parada de baño en Plettenberg Bay
- hacer senderismo en el Parque Nacional Tsitsikamma
- aprender a surfear en Jeffreys Bay
- desde Port Elizabeth conducir hasta el Addo Elephant Park
Desde Port Elizabeth puedes tomar la Ruta 62 de regreso a Ciudad del Cabo. Pasarás, por ejemplo, por Oudtshoorn y podrás visitar una granja de avestruces o – antes de volver a llegar a Ciudad del Cabo – volver a pasar la noche en una bodega en Franschhoek.
#3 Cabo de Buena Esperanza con Boulders Beach
La alternativa más corta a la Garden Route es una excursión de un día a la Península del Cabo. Desde Ciudad del Cabo te diriges en coche hacia Hout Bay. Allí comienza la Chapman’s Peak Drive – probablemente la carretera panorámica más bonita del mundo, que serpentea 150 metros sobre el mar a lo largo de la costa y tras cada curva desvela la siguiente vista impresionante de bahías, acantilados y el mar. Son unos 44 kilómetros hasta el Cabo de Buena Esperanza.
Una vez llegado al cabo puedes tomarte la foto de recuerdo en la famosa tabla de madera, disfrutar de la vista infinita sobre el océano y descubrir la vegetación única de fynbos con orquídeas y proteas silvestres.
En el viaje de vuelta te esperan otros dos puntos destacados: Haz una parada obligatoria en la Boulders Beach en Simons Town. La playa es un área natural para innumerables pingüinos, que caminan por la arena, nadan en el mar y también posan gustosamente para fotos. En Muizenberg podrás después empaparte del estilo relajado de muchos surfistas. Siéntate en alguno de los muchos cafés cool, observa a los surfistas y disfruta de las famosas coloridas casetas de playa.
#4 Parque Nacional Kruger
Una superficie tan grande como Renania-Palatinado, 180 mamíferos y anfibios diferentes, 500 especies de aves, los Big Five en libertad – el Parque Nacional Kruger es uno de los lugares más hermosos y emocionantes del mundo. Desde su fundación en 1898, el objetivo es proteger la biodiversidad del país y dar a los animales un hogar seguro.
Puedes recorrer la mayor reserva de fauna de Sudáfrica ya sea con tu propio coche o hacer un safari con ranger. Nosotros te recomendamos reservar un tour:
Te subes a uno de esos jeeps típicos, te sientas un poco más alto y puedes mirar tranquilamente a la izquierda y la derecha, en vez de concentrarte en la carretera. Al mismo tiempo, oirás muchos datos apasionantes e interesantes del ranger, que siempre te da los mejores consejos sobre hacia dónde mirar para descubrir los animales.
#5 Durban
Después de Johannesburgo y Ciudad del Cabo, Durban es la tercera ciudad más grande de Sudáfrica y sigue siendo un verdadero secreto. Aquí vivirás una vibrante mezcla cultural como en ningún otro lugar. El ambiente y la arquitectura son fruto de la influencia zulú, colonial e india – y también en la gastronomía descubrirás aquí una variedad increíblemente mezclada.
La mayoría de la gente se concentra en el paseo marítimo – la “Golden Mile” – en las playas de arena blanca y en el puerto. Durban también es conocido como el “Paraíso del surfista” y por muchas más actividades al aire libre. Vayas donde vayas, siempre hay algo pasando al aire libre. Encontrarás corredores, patinadores en línea y ciclistas de montaña. Y claro, tú también puedes, por supuesto, ponerte en marcha. Durban es perfecto para unas vacaciones deportivas.
Un último consejo: sal sin falta hacia el Valle de las Mil Colinas y explora el paisaje y la naturaleza.
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